Cambiar el grosor de tu hebra: ¿Cómo hacer lana más gruesa?

¡Hola duendecillo!
Hoy te voy a enseñar un par de trucos para cambiar el grosor de tus lanas y hacer lana más gruesa para todos tus proyectos de crochet y amigurumi. ¡Es super fácil y te va a encantar! Para ello, vamos a seguir dos videotutoriales que ya están en el canal de Youtube.

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En ocasiones compramos un ovillo que nos encanta, por el color, por la textura, por su composición… pero a la hora de hacer nuestros amigurumis nos damos cuenta de que el grosor es inadecuado para nuestro amigurumi: Es demasiado fino para hacer un amigurumi grande. Y no queremos hacer un amigurumi que tenga millones de vueltas. La manera más sencilla entonces para cambiar el tamaño de nuestro amigurumi, es cambiando el grosor de nuestra hebra: Vamos a hacer lana más gruesa.

Lo normal, o lo habitual, es tener dos ovillos: De esta manera podrás tejer con las dos hebras y una aguja mayor. Esto para mí era una complicación, porque si sólo había comprado un ovillo de ese color (que suele ser lo habitual) tenía que deshacer parte del ovillo y hacer otro miniovillo, o dos miniovillos que me permitieran tejer a la vez. Tener los dos ovillos rodando por la mesa es un inconveniente: A menudo se mueven, se caen, rueda uno, rueda el otro… un auténtico caos en tu escritorio. Olvídate de usar el bol lanero porque normalmente, uno rueda mejor que el otro dentro del bol y se deshace, y tienes que tirar del otro.

Así que aquí llegan mis dos trucos infalibles para hacer lana gruesa con un sólo ovillo. Primero, veremos como sacar dos hebras del mismo ovillo a la vez:

 Y ahora que ya sabes trabajar con las dos hebras, y te has acostumbrado a tejer con hebras sueltas (atento a los consejos que te doy, si ves que te cuesta tejer con la aguja las dos hebras a la vez) puede ocurrir lo siguiente: Que necesites una hebra AÚN más gruesa. Esto es ideal para tejer amigurumis gigantes, y también para proyectos de crochet como cuellitos o bufandas que quieras que sean muy, muy calentitos. Teje con triple hebra y un sólo ovillo gracias a este super truco:

Si lo combinas con un punto fantasía, como el punto estrella o el punto jazmín (¡Que sí, los aprenderemos en el canal!), tienes un tejido tupido, grueso y muy, muy calentito que va a hacer las delicias de cualquiera. ¡Prometido!

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